El Gobierno alemán planea destinar unos 1.000 millones de euros a créditos para pequeñas y medianas empresas españolas en el marco de un paquete de medidas para combatir el desempleo en los países del Sur de Europa. Dicha información se extrae de un documento del Ministerio de finanzas alemán que aún debe ser aprobado para los presupuestos del 2014.
El Ministerio prevé que el banco estatal de desarrollo, KfW, proporcione préstamos por un importe conjunto de 800 millones de euros, así como otros fondos destinados a mejorar la estructura de capital de las pymes españolas.
El ministerio comenta que éste paquete bilateral de ayudas se compone de distintos instrumentos financieros y alcanza un volumen total de unos 1.000 millones de euros. Y añade que las medidas resultan apropiadas, porque superar las dificultades financieras y de liquidez de las pymes de los países rescatados es crucial para mantener el empleo y crear nuevos puestos de trabajo.
Se puede decir que dicha medida debe su origen al pacto firmado el pasado mes de abril. El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, y el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, sellaron un acuerdo para que inversores germanos aporten capital a pymes españolas que sean solventes, con el fin último de reducir el desempleo. Se prevé reducir en mayor parte el desempleo juvenil puesto sería un buen comienzo de dicha medida si finalmente fuere aprobada.
Una vez más podría decirse que Alemania lleva las riendas con otra posible nueva medida de desarrollo, para facilitar salir a flote e intentar reducir la elevada tasa de desempleo. No obstante, se podría plantear si la cifra estimada acabará destinada en su totalidad, si habrá alguna contraprestación exigida de manera indirecta por parte de Alemania y si dicha cifra será suficiente para dotar la elevada tasa de desempleo que persigue a la sociedad española.
A pesar de la inyección de dinero, cabe plantearse el efecto que puede presentar a largo plazo. ¿Acabarán superando las exportaciones españolas a las germanas por la rebaja de costes laborales?
En los próximos dos años si la competitividad aumentase de manera notable, ¿sería posible que Alemania, como fuente del préstamo, exigiera cambios en los costes laborales o en los tipos de gestión de los presupuestos españoles? Los análisis realizados hasta el momento, muestran a largo plazo, que la rebaja de los costes laborales en España redundará con toda probabilidad en una mejora de la competitividad que tendrá como consecuencia lógica un aumento de su potencial de exportación. Y se estima que el consecuente incremento de productividad que experimentarán las empresas españolas es clave a la hora de abordar la conquista de nuevos mercados, tan necesaria a la vista de la actual coyuntura.
A raíz de dicho incremento competitivo y aumento de mercado para las pymes españolas, ¿Podrían plantearse problemas entre el mercado alemán y español?
Los años dirán si la inyección monetaria para aliviar el elevado desempleo en España sale a cuenta o tiene como contraprestación una deuda mayor con Alemania.
